La tortuga griega o tortuga marginada es una tortuga endémica de Grecia y a su vez la tortuga europea más grande. El nombre de marginada refiere a la parte posterior de su caparazón que posee una especie de faldón bastante más visible en los machos. Su nombre científico es Testudo marginata.
¿Qué aspecto tiene la tortuga griega?

Estas tortugas son las más grandes entre las tortugas europeas llegando a medir más de 35 cm de longitud y con un peso sobre los 5 Kg. Su caparazón es negro con manchas amarillas. Su cabeza y patas son de color marrón muy oscuro.
Estas tortugas poseen un sentido de la vista muy desarrollado pudiendo distinguir formas y colores e incluso reconocer a las personas. Su sentido de la orientación es también muy preciso pudiendo regresar sin mayores problemas al lugar de origen.

¿Sabías que? La tortuga griega desde la antigüedad ha sido capturada y criada como alimento, herramienta o animal de compañía. Del caparazón se hacían objetos de uso común, obras de ebanistería y joyería o cajas de resonancia para usos musicales.
¿Qué comen las tortugas griegas?
Son animales completamente herbívoros que en la naturaleza se llegan a alimentar de hierbas secas, cactus, higos chumbos aunque si es el caso completarán su dieta con caracoles, invertebrados e incluso carroña.
La alfalfa, los cardos, el diente de león, la madreselva, el romero, entre otros son los alimentos base cuando están en libertad. No toleran bien la fruta por las elevadas concentraciones de azúcar.
No se les debe alimentar con carne, leche o queso, pan, cítricos o kiwis. Necesitan beber agua y deberán tener cerca agua limpia para beber y bañarse.

¿Dónde vive la tortuga griega?
Este reptil es un animal terrestre endémico de Grecia aunque hace siglos fue introducida en Cerdeña, Italia donde se le conoce como tortuga sarda.
En su hábitat natural se encuentran en terrenos mediterráneos que se caracterizan por inviernos suaves con precipitaciones moderadas y veranos secos con altas temperaturas.
Son animales que se encontrarán en arbustos, colinas pedregosas y prados con plantas silvestres y flores. Necesitan tomar el sol en las primeras horas del día y una vez activadas sus funciones metabólicas se dedicarán a buscar comida.